Inesperado derroche de talento del compositor para este intrascendente thriller de Schumacher. Supone una agradecida excepción dentro de la aportación de Shore en un género en el que es autentico maestro, aportándole una sensibilidad dramática ausente en otros trabajos como Se7en, The Game o Silence of the Lambs. Para ello compone una serie de emotivos temas para abordar la relación entre el niño protagonista y su familia y con la abogado que le representa, con importancia de la guitarra y pequeñas dosis de humor. Pero eso no quita para que el resto sea otra lección magistral de cómo Shore maneja como nadie los resortes del thriller aportando temas que rozan el terror puro, mucha intriga, brillantes temas de acción y un constante deseo de experimentar que ha caracterizado a Shore desde sus inicios. Un trabajo a incluir entre sus mejores aportaciones al género a la vez de suponer un cambio de dirección de agradecer sin perder personalidad ni sacrificar talento.