Un grupo de adolescentes debe resolver el misterio sobre una serie de repentinas y macabras muertes que suceden en su pueblo.
Un tema principal gótico abre y cierra el telón de una creación que no acaba de encontrar ni el tono ni el sitio en un atractivo filme que acaba por no necesitar la música para significarse. Lamentablemente, y con la excepción del tema principal esta es una banda sonora funcional, eficiente, pero sin ideas. Se limita a ir acompañando el relato, dotarlo de algún colorido pero de modo básico y despersonalizado.