Comedia en la que unos padres se desesperan al ver cómo su hijo adquiere dimensiones gigantescas tras haber probado accidentalmente una fórmula química.
El compositor pauta todas las secuencias del filme con una música animada, imparable, cómica y desenfrenada. Destaca también su irónico tema romántico, aplicado para destacar la inicial felicidad familiar.